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Importancia de tener un buen manual de identidad corporativa

Si te pregunto acerca del manual de identidad corporativa de tu empresa y no solo sabes de qué te estoy hablando, sino que tienes el tuyo, ¡Felicidades! Comprendes la importancia de tener una marca bien definida y unificada.  

Si no es tu caso y todo esto te está sonando a chino es hora de que te contemos un poco más acerca de ello. No es solo una cuestión estética, se trata de que tu marca funcione en armonía y con un sentido visual que hará que tu público te recuerde. ¡En Analize te contamos qué es y cómo utilizarlo correctamente!

¿Qué es un manual de identidad gráfica o corporativo?

Piensa cuando conoces a alguien por primera vez ¿Qué se te viene a la cabeza? Le percibimos de una manera determinada ya sea por cómo va vestido, cómo habla o incluso cómo se mueve. Nos formamos una idea de cómo es esa persona sin ni siquiera conocerla. Lo mismo pasa con las marcas, cuando entramos en contacto con ellas nuestra cabeza la percibe inconscientemente a través de todo lo que nos transmiten los elementos que la forman.  Y esta percepción es clave para diferenciarnos de la competencia y para que el público de nuestro sector se decida por nosotros y no por ellos.  

Y te estarás preguntando… ¿Qué tiene que ver esto con un manual de marca? Bien pues lo tiene todo que ver, porque un buen manual de identidad corporativa es un documento que recoge todo el concepto de nuestra marca; desde las normas de utilización hasta todos los elementos gráficos que la forman. Podría considerarse nuestro guía para que la imagen de nuestra empresa se vea acorde a nuestros valores y 100% unificada. En resumen, es donde quedará recogida cómo es la personalidad gráfica de nuestra marca.

Además, es el documento que debemos entregar a quienes derivemos la parte de comunicación de nuestra empresa para que entiendan cómo es y cómo aplicarla correctamente. 

¿Cómo utilizar bien mi manual de identidad corporativo?

Ahora que ya sabes en qué consiste un buen manual de marca, te vamos a explicar algunos de los puntos más importantes a la hora de utilizarlo.

Sigue la paleta de colores

Escoger una paleta de colores adecuada es igual de importante que tener un buen logo. Muchas empresas son reconocidas por los colores que utilizan ya que a través de estos se reflejan sus valores y recibimos un determinado mensaje. 

Por ello, debemos seguir la paleta de colores que indique nuestro manual de forma que nuestra imagen quede en sintonía y bien definida. Utilizar colores que no tengan que ver con nuestra marca creará confusión en nuestro público y nos estaremos alejando de nuestro objetivo.

Aplica las tipografías indicadas

Al igual que los colores, las tipografías también nos expresan emociones y valores. Por ello, en nuestro manual de identidad gráfica encontraremos tipografías principales y secundarias que complementan a la perfección la imagen de nuestra marca. 

Debemos seguir las indicaciones de uso de cada una de ellas para utilizarlas correctamente. Usar tipografías sin sentido o mezclarlas sin pensar no nos dará buenos resultados.

No deformes el logo bajo ningún concepto 

A veces, tendemos a deformar nuestro logo para colocarlo en el lugar que nos interesa como en cabeceras, pies de página, facturas… Lo estiramos, achatamos, juntamos las letras o las eliminamos según nuestra conveniencia pensando que no se va a notar o que no es relevante.

Pero la realidad es otra, ya que nuestro logotipo, si ha sido diseñado por un profesional, está pensado al milímetro para que tenga un equilibrio y una coherencia visual. Además, nuestro cerebro es muy inteligente y aunque no nos demos cuenta es capaz de percibir las alteraciones y desequilibrios, por lo que engañarle no es una tarea fácil.

Utiliza las versiones de tu logo con sentido

No es lo mismo colocar tu logotipo sobre un fondo blanco y limpio, que sobre una imagen oscura. Por ello, en el manual de identidad corporativo podrás encontrar diferentes versiones de tu logo; horizontal, vertical, a una tinta, en positivo, negativo… para que se adapten a las necesidades que requiere tu empresa en cada momento. 

Además, suelen ir acompañados de una descripción para guiarnos y que sepamos cuando utilizar adecuadamente cada uno de ellos. 

En definitiva, si sigues las indicaciones de tu manual de identidad corporativo a la hora de aplicar tu marca conseguirás que tu imagen visual esté 100% en sintonía con los valores que la representan. Si, por el contrario, aún no tienes tu manual de identidad corporativo te aconsejamos que contactes con un diseñador para que te ayude a conseguir que tu marca tenga una imagen visual coherente, unificada y llena de personalidad.

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